PUENTES LABORALES
EL SECRETO DE LA INTERMEDIACIÓN LABORAL EN EL SILE
Este fin de año, como sucedió antes, miles de mujeres y hombres culminarán sus estudios en alguna de las varias carreras de institutos técnicos del país, y la mayoría de ellos lo hará con la garantía de haber participado de una intensa práctica laboral y con las perspectivas intactas de contar con un trabajo en empresas relacionadas con su rubro o iniciar emprendimientos personales. Todo ello con el aporte del Proyecto de Formación Técnica (FTP) de la Cooperación Suiza, que impulsa, a través del consorcio CEMSE/CEE y la Fundación Educación para el Desarrollo (Fautapo), con los Servicios de Intermediación Laboral y Emprendimiento (SILE), una iniciativa similar a la exitosa Bolsa de Trabajo de Infocal Santa Cruz.
Hernán Herrera, estudiante de Agropecuaria del Instituto Avelino Siñani de Mizque; Noemí Miranda, de Industria Textil del Instituto Tecnológico María Cristina de Colcapirhua; y Daniel Miranda, de Sistemas Informáticos del Instituto INCOS N°3 de Quillacollo, son tres de estos futuros egresados, todos beneficiarios, en una u otra manera, por el SILE.
Con distintos intereses y realidades, los tres no solo están preparados para bucear en el ámbito laboral, al que no solo ya conocen, sino que han abordado con sus propios emprendimientos, habilidad que en algún caso potencian con carreras alternativas en universidades.
Pero antes de conocer sus historias, respondamos ¿qué es el SILE?
Son los servicios que prestan 24 institutos técnicos y centros de educación alternativa en toda Bolivia con el fin de mejorar las oportunidades de inserción laboral y de emprendimiento de sus estudiantes.
En otras palabras, la labor de los SILE es ser intermediarios entre la oferta y la demanda de trabajo o la posibilidad de generar uno.
Este nexo o contacto lo hacen con instituciones de apoyo o empresas que estén interesadas en colaborar con los futuros profesionales.
Para ello se identifican potenciales empleadores que promueven o apoyan el emprendimiento y se asiste a los emprendedores con las ideas o el despegue de sus planes de negocio.
Una de las personas que nos pueden hablar con propiedad de la iniciativa es Ana Lía Zapana, responsable nacional de Intermediación Laboral, Autoempleo y Redes del Proyecto de Formación Técnica Profesional.
Ella coordina y vela por el trabajo de las 24 oficinas SILE del país y en los institutos y centros que lo desarrollan.
Zapana tiene la esperanza de que en el futuro la experiencia sea íntegramente autosostenible, en lo que ya trabajan varios institutos y centros, con el liderazgo de profesores y autoridades, que por ahora trabajan de manera ad honoren para el funcionamiento del SILE. Dejemos que ella misma lo explique en el siguiente video.
INCOS QUILLACOLLO, CAMINO AL AUTOSOSTENIMIENTO
Una de las experiencias más exitosas en la implementación del SILE fue la del Instituto Nacional de Comercio INCOS N° 3, del municipio de Quillacollo, en Cochabamba, que este año ganó uno de los primeros lugares en la categoría de Institutos Técnico Tecnológicos, de un concurso que lanzó el FTP para incentivar avances innovadores en el funcionamiento de los SILE.
Este instituto, que pronto cumplirá 50 años, tiene dos turnos: el diurno, con tres carreras: gastronomía, contaduría y administración de empresas; y el nocturno, con contaduría, secretariado y sistemas informáticos.
El responsable de esta oficina SILE es el profesor Saúl Mogro, de profesión informático, lo que le ha permitido desarrollar con solvencia el sistema, que es motor de la iniciativa, ya que es a través de una base de datos virtual que se registra a los estudiantes para vincularlos al mundo laboral, pero también para hacerles el respectivo seguimiento.
Mogro y su equipo no solo trabajaron en una red social propia para el Instituto y el SILE, sino que también impulsaron talleres sobre habilidades blandas e inclusión del enfoque de género en las clases.
Gracias a estos avances ganaron el primer lugar, equivalentes a Bs 25 mil, con lo que adquirieron una impresora y una fotocopiadora, que permitirá hacer más eficientes los procesos de registro.
Este Instituto ya trabaja en cómo hacer autosostenible el SILE, a pesar de tener apenas un año de funcionamiento.
Ganadores del concurso SILE
Categoría Institutos Técnico Tecnológicos
Primer lugar
Instituto Nacional de Comercio INCOS N° 3 del municipio de Quillacollo, Cochabamba, a cargo de Saúl Mogro.
Instituto Tecnológico Nacional de Comercio Federico Álvarez Plata, de la ciudad de Cochabamba, a cargo de Rita Nina Mejía.
Instituto Tecnológico Jach´a Omasuyos, del municipio de Achacachi, en La Paz, a cargo de Germán Apaza.
Instituto Tecnológico Superior Caracollo, del municipio de Caracollo, en Oruro, a cargo de Maribel Ayma.
Segundo lugar
Instituto Tecnológico María Cristina del municipio de Colcapirhua, en Cochabamba, a cargo de Daniel Rodríguez.
Categoría Centros de Educación Alternativa
Primer lugar
Centro de Educación Alternativa Franz Tamayo de El Alto, en La Paz, a cargo de Sergio Cordero.
Centro de Educación Alternativa Hno. Nilo Cullen del municipio de Caranavi, en los Yungas de La Paz, a cargo de Javier Poma.
Centro de Educación Alternativa Corea en la ciudad de El Alto, en La Paz, a cargo de Edwin Callizaya.
Centro de Educación Alternativa Madre Marie Poussepin, del municipio de Chulumani, en los Yungas de La Paz, a cargo de Macario Ticonipa.
Segundo lugar
Centro de Educación Permanente CAEM, del municipio Jesús de Machaca, en La Paz, a cargo de Rubén Condori.
NOEMÍ ESTÁ SEGURA DE CONSEGUIR TRABAJO
Cuando la pandemia estaba en su punto más crítico, Noemí Miranda, de 18, que acababa de salir del colegio Martín Cárdenas, en Vinto, optó por seguir la carrera de ingeniería química en la universidad, pero no pudo ingresar por distintos factores. Para ganar tiempo en tanto se repostulaba, visitó el Instituto Tecnológico María Cristina, de Colcapirhua, donde se enamoró del perfil de la carrera de Industria textil. Hoy, luego de tres años de estudio y práctica, está a punto de egresar, luego de haber realizado sus prácticas en Fomento al Trabajo Manual (Fotrama), gracias a la gestión de su Instituto y del plantel docente vinculado al SILE, liderado por Daniel Rodríguez. A la par, sigue otra carrera relacionada: química industrial.
Conozcamos esta experiencia en el siguiente video:
MIZQUE, DONDE EL SILE ES UN PROGRAMA ESTRELLA
El Instituto Tecnológico Avelino Siñani de Mizque tiene una cualidad que pocos centros similares tienen la fortuna de contar: módulos productivos, donde las y los estudiantes realizan sus prácticas antes de egresar de carreras como agropecuaria y veterinaria y zootecnia. Esto les permite tener un elevado nivel práctico de lo aprendido, que se potencia cuando salen al mercado laboral como parte de sus prácticas guiadas en empresas del lugar, esta vez bajo el auspicio del FTP y el SILE, que es liderado por el profesor Rafael Fernández e impulsado por Patricia Cerezo, rectora del Instituto.
Esto quiere decir que hay dos niveles intensivos de práctica, lo que asegura no solo un mejor rendimiento académico sino un pie dentro del mercado laboral o incluso en emprendimientos propios, como es el caso de Hernán Herrera, que antes de salir de la carrera ya tiene un proyecto en marcha de ganado caprino en el municipio vecino de Aiquile, y fue ganador del primer lugar de la categoría Me gradúo emprendiendo del concurso Emprendiendo con formación técnica 2022, dotado de Bs 15.000, dinero con el que compró maquinaria productiva para fortalecer su emprendimiento.
Como él, tantos otros estudiantes del Instituto se desempeñan en sus rubros, no solo dentro del país sino también fuera.
Conozcamos esta historia en la voz de sus protagonistas.
BOLSA DE TRABAJO, UN MODELO A SEGUIR
Antes de 2020, la Fundación Infocal Santa Cruz trabajaba en la intermediación entre sus estudiantes y las empresas, potenciales lugares de desempeño laboral, a través de correos o incluso algún cartel pegado en las ventanas y puertas del instituto.
Desde esa fecha, sin embargo, dio un salto cualitativo que no solo la ha convertido en un referente y líder nacional de intermediación laboral, sino que ha alcanzado niveles de inserción laboral impresionantes, al grado que entre 6 y 7 de cada 10 estudiantes logran acceder a un trabajo gracias a este sistema.
Se trata de la Bolsa Laboral, un sistema en línea que vincula a las más de 2.300 empresas con los 5 mil estudiantes de carreras como enfermería, operador de computadoras, community manager, diseño gráfico, construcción civil, diseño de modas o marketing.
“El objetivo es proveer de personal técnico calificado a través de una página web para las empresas y una aplicación para los estudiantes”, dice que Alejandra Sosa, encargada de la Bolsa de Trabajo, para quien el secreto es “ir de la mano del empresario privado”, ya que Infocal forma parte de ellos.
Conozcamos esta experiencia exitosa de intermediación laboral:
